Los empresarios que participaron en el CCK de los anuncios del presidente Mauricio Macri el 30 de octubre sienten una brecha entre el espíritu de aquellos lineamientos y la letra chica que muestran en las reuniones técnicas los ministros que afilan el lápiz en torno a las reformas tributaria y laboral. Las caras largas especialmente se suman en torno a las modificaciones tributarias.
Los CEOs apuntan al Ministerio de Hacienda más que a la cartera laboral porque los ejecutivos de las principales industrias del país, sobre todo las que pisan fuerte en las provincias, descubrieron que lo largo de los 5 años, cuando la reforma este plenamente en vigencia terminarían pagando más que ahora en algunos casos cuando se supone que deberían estar premiados por haber estado al día con pagos previsionales e impuestos.
Los privados trabajan en sugerencias alternativas al borrador del ministro Nicolás Dujovne; porque pretenden demostrar inconsistencias. En el caso de la reforma tributaria no es sólo el caso del impuesto interno a los vinos, que puso en vigilia a todos los mendocinos sino otras incongruencias entre el tratamiento para fábricas radicadas fuera de Capital o provincia de Buenos Aires. Algunas de estas críticas se escucharon durante la reunión que mantuvieron el martes Dujovne y los ministros Francisco Cabrera (Producción) y Jorge Triaca (Trabajo) en la Unión Industrial, que conduce Miguel Acevedo. Fue un encuentro áspero pero finalizó acentuando el consenso en torno a la necesidad de estas reformas. El Gobierno pronostica con optimismo que se sancionará con la actual composición del Congreso. Dudoso. El termómetro político pareciera en todo caso apuntar a una discusión en extraordinarias con mucha negociación previa con los gobernadores y los nuevos legisladores.
Es que en todo caso, los consensos en torno a los impuestos especialmente dependerán de cómo se complementen estos cambios con las modificaciones en ingresos brutos y sobre esto no existe aún ningún detalle. Lo que, sin duda, se rescata es que ambas reformas apuntan a tener una base imponible y de generación de empleo en blanco mayor a la actual y por lo tanto esto significará empresas más transparentes y negocios más claros.
Por eso entidades como la Asociación Empresaria Argentina, presidida por Jaime Campos, o incluso referentes regionales como la Bolsa de Comercio de Rosario, que preside Alberto Padoán, y donde se realizó el primer encuentro del B20 con la Argentina como anfitriona. En épocas en que una Justicia parece quitarse la modorra de causas cajoneadas y empezar a avanzar sobre los hechos de corrupción este asunto no es menor para los hombres de negocios que quieren separar la paja del trigo dentro del sector privado. Asimismo, las turbulencias judiciales dentro del Gobierno generan rumores en los pasillos de la Casa Rosada, como por ejemplo que la cartera de Finanzas volvería a ser secretaría en el inminente achique de oficinas públicas.
Otro dato que ya es un hecho, es que la inflación anual se escapará bastante de la pauta oficial. Ya nadie habla de 20/21% sino en todo caso de 23%, a pesar de que las mediciones de octubre estarían en valores similares a septiembre pero a fin de año se espera un rebote en precios. Con todo, la industria confirmaría su repunte, para la consultora FIEL de 5% en su última medición y la actividad económica en el tercer y cuarto trimestre de este año rondaría el 4% de suba, es decir una foto positiva para el comienzo del 2018. En todo caso lo que más preocupa en esa consultora a economistas de la talla de Daniel Artana y Juan Luis Bour es cómo será la redacción que finalmente salga del Congreso en torno a las reformas troncales que encara el Gobierno.
El consumo, aunque sigue siendo lento en remontar también despierta optimismo. De ahí que, por ejemplo, los sectores denominados sensibles como calzados, textiles e indumentaria hayan silenciado sus quejas. En Farmacity, por ejemplo, Alejandro Gorodisch, quien reemplazó a Mario Quintana en la presidencia de esa compañía, celebró el repunte en el consumo aunque siga estando por debajo de los niveles de 2015. «Prefiero esto», sinceró al anunciar 200 aperturas en los próximos 2 años con unos nuevos 5000 puestos de trabajo directo e indirecto.
Hay otras señales que también ponen el semáforo en verde como la reciente ratificación por parte del parlamento mendocino a la nueva ley de ART que disminuyó la litigiosidad desde su sanción en febrero pasado a nivel nacional. También la reciente firma de un acuerdo de complementación comercial con Chile que permitiría acceder desde este lado de la Cordillera y con arancel cero a los 65 destinos con los que el vecino transandino ya tiene convenios de comercio, sobre todo con Asia.
Nota publicada en: https://www.cronista.com/columnistas/Luces-y-sombras-de-las-reformas-de-Macri-20171109-0011.html